Primavera en el olivar, GENAVE

Maravillosa
Nos nos gustaría pecar de agoreros pero se está dando un cuerioso fenómeno que, a buen seguro, se agudizará con el tiempo. La población envejece y son bastantes los pequeños propietarios que no pueden trabajar sus campos y, lo que es peor, se echa mucho en falta a las personas que tomen el relevo o que hagan las tierras aunque sean en codiciones poco favorables para el dueño. En algo habrá que pensar porque si no el panorama se tornará bastante oscuro.
La naturaleza es todo lo que nos rodea y no ha hecho el hombre. Es el Sol y el aire que respiramos, es la montaña y el mar, es la tierra del suelo que pisamos; es la flor de estos "génaves", los olivos centenarios, el pájaro que canta en la enramada;somos nosotros mísmos.
La leyenda que se cuenta acerca del nombre de Génave parece no tener visos de realidad. A ver si se anima ese autor anónimo de Génave que está a punto de publicar un libro sobre nuestra villa y "da luz" A ese enigma.
Muy bueno el anécdota que se han inventado.