Un 10 para la directiva de la Hermandad de la Virgen por lo bien organizado que ha estado todo, desde la entrada hasta la solemne procesión del día de la fiesta, que fue sobrecogedora;un 10 para el pueblo de Bedmar que otro año más ha sabido estar alrededor de su patrona y honrarla muy dignamente.Pero donde hay luces, hay sombras:un 0 para el cura del Manquillo por la falta de humildad y el afán de protagonismo, cortando al párroco en mitad de la misa para intentar lucirse él e intentar dirigir el canto de un pueblo que no necesita directores porque ese canto le sale del corazón.Otro 0 para las representación de las autoridades en las procesiones por no saber estar ni saber representar con la dignidad que se merece Bedmar.Deberían hacer algún que otro cursillo de protocolo.Fue bochornoso que en la procesión, cuando todo el mundo estaba en actitud de respeto y de silencio, ellos dieran la nota discordante pasando de lo que en ese momento debían hacer.