Yo también soy antiarroyadora, se tendria que hacer un club, porque ya hay mucha gente...hasta en el nombre de las peñas se fijan, pobrecitos, el arroyo es un pueblo en crisis psicologica, que no tiene identidad y le ha dado por imitar a Beas, pero se siente, porque por mucho que haga nunca le llegara a la suela de los zapatos. Y que conste que no soy de Beas.