Esto es un recordatorio a mi PADRE: nunca te olvidaré, as marcado mi vida, para lo bueno y lo malo. No puedo olvidarte, a veces recuerdo mis años de niñez y juventud, sólo pudiste darme lo que tenías, pero he aprendido contigo a valorar lo que somos las personas, lo que valemos, para lo que servimos, siempre serás mi padre, apesar de todos lo momentos vividos, los buenos y los malos. Nunca más volveré a verte pero tu recuerdo ya sé que me marcará para el resto de mi vida. Adios papa, nunca te olvidaré pase lo que pase. HASTA SIEMPRE.