a mi madre
siempre que miro es al cielo,
porque yo quisiera ver
aquel lucero del alba
que yo nunca olvidare,
y te busco cada noche
asomada a mi ventana
mirando sin poder verte
en una noche estrellada.
pero se que tu me miras
aunque yo no vea nada.
yo te mando un beso, madre,
como una rosa bordada,
en un pañuelo de seda,
para que puedas besarla.
contigo sueño de noche,
de dia y de madrugada,
para poder mirar al cielo
asomada a mi ventana
y decirte, ¡madre mía ¡
¡madre mía de mi alma ¡,
que tu hija no te olvida
aunque mil años pasaran
hasta siempre mama
siempre que miro es al cielo,
porque yo quisiera ver
aquel lucero del alba
que yo nunca olvidare,
y te busco cada noche
asomada a mi ventana
mirando sin poder verte
en una noche estrellada.
pero se que tu me miras
aunque yo no vea nada.
yo te mando un beso, madre,
como una rosa bordada,
en un pañuelo de seda,
para que puedas besarla.
contigo sueño de noche,
de dia y de madrugada,
para poder mirar al cielo
asomada a mi ventana
y decirte, ¡madre mía ¡
¡madre mía de mi alma ¡,
que tu hija no te olvida
aunque mil años pasaran
hasta siempre mama