vista del altar Mayor de la iglesia de Santa María de la Granada, NIEBLA

De todas formas, debido a los problemas que emanan de una investigación casi inexistente, se mantiene la duda si el nuevo recinto de tapial fue construido en época almorávide y sólo fue remodelado posteriormente durante el periodo almohade, con lo que es difícil poder distinguir qué zona de la muralla podría ser atribuida a un momento y otro, incluso investigaciones recientes hacen pensar que una buena parte del recinto se edificara ya en los tiempos de Ibn-Mahfoh. Sin duda, las puertas en recodo, como la de Sevilla, El Agua, El Buey, El Socorro o El Desembarcadero, siguen las técnicas de la poliorcética almohade del siglo XVIII, según se ha documentado en otras ciudades hispano musulmanas (GONZALO, 1986). Fundamentalmente se dispone como cerca en tapia, los ladrillos y sillares donde fueron necesarios, apoyada sobre el sustrato de calcarenitas, sobre cimientos construidos ex profeso en el sustrato de formaciones arqueológicas previas, o también sobre estructuras murarias anteriores. A lo largo del recinto se dispusieron hasta 46 torres cuadradas avanzadas y dos de planta octogonal, así como cinco puertas en recodo, que es donde con una mayor profusión se utilizaron sillares, en muchos casos reutilizados de edificios anteriores, y ladrillo. En momentos más recientes se hizo además un portillo en la zona N que mira al antiguo arrabal, denominado del Agujero, y también se abrieron dos vanos en la cerca, junto a la puertas del Buey y del Socorro, y otro en el paño exterior de la de Sevilla, para facilitar así el acceso de tráfico rodado directamente a la ciudad.
(21 de Abril de 2019)