No voy a criticar nada como se me indica antes de poner el comentario. ¡¡¡Faltaría mas!!!. Son tantos y tan buenos los recuerdos de mis tiempos de niño, cuando, con mis padres, acudíamos cada verano a pasar una muy buena temporada en el pueblo marocho. Yo debería tener entre los cinco y los nueve años. Mi padre, militar, era natural de Cádiz pero mi abuelo (desconozco si era marocho) ejercía allí su profesión de carabinero y allí vivía con su mujer, mi abuela paterna. Recuerdo ahora, como si fuera ayer, la calle por donde correteaba y llenaba mi cara de sudor. Recuerdo aquel hombre que nos daba una taza de garbanzos "tostaos" a cambio de no sé que cantidad de la misma legumbre pero sin tostar. ¿Que habrá sido de él?. Recuerdo a Demetrio, soldado que hizo la "mili" en Sevilla, supongo que "enchufado" por el teniente Sánchez, mi padre, que después ascendió y hubo de llevar a su familia al nuevo destino en Valencia, donde aún resido. Recuerdo aquella ESCUELA, en casa destartalada, con su maestra y nuestros pizarrines de tamaño cuartilla. Doña María, recuerdo que se llamaba y Valonero de apellido, que murió en Valencia. Mi abuelo, llamado Diego Sánchez arrastraba, como solía ser costumbre, un apodo. Pertenecía a la saga de los CONEJO y, al parecer era muy conocido en la villa, tanto él como después sus hijos Diego, Antonio y Pepe que desviaron sus vidas, como era habitual en aquellos tiempos hacia profesiones castrenses. No quiero ser pesado en mi exposición de vida pero si quiero dar las gracias a todos los que conocí en aquellos, ya lejanos tiempos, y al PUEBLO de Encinasola por haberme hecho tan feliz, en aquella difícil niñez que nos tocó vivir. Soy ángel, hijo de Antonio y nieto de Diego Sánchez, apodado CONEJO o de los CONEJO, que igual me dá.
Gracias MAROCHOS. Quizá en otra ocasión me permita recordaros mas vivencias maravillosas para mí, naturalmente, y si puedo, me encantaría volver a disfrutar con los recuerdos de aquella época, pero en vivo, allí.
Gracias MAROCHOS. Quizá en otra ocasión me permita recordaros mas vivencias maravillosas para mí, naturalmente, y si puedo, me encantaría volver a disfrutar con los recuerdos de aquella época, pero en vivo, allí.