Ay.el don de la ubicuidad. Yo quiero tenerlo. De hecho, me estoy acercando. Soy como dios.estoy en todas partes. En todas las partes mías, rectifico. Mi mundo es muy ancho, y grande, y fuerte. Pero es mi mundo. No me interesa el tuyo ni el de nadie. Con el mío tengo bastante. Y aguanto y resisto, aquí, como una piedra. Y sigo amando. Amanddo.hasta la perpetuidad. Te quiero Manuel.