Hospedarse en sus instalaciones permite que el viajero disfrute de una verdadera ruta turística al pasear por la Abadía del Sacromonte, la Alcazaba, el Alcázar del Genil o los Baños Reales del Palacio de Comares. Pero Granada es más que la ciudad y para conocerla también son importantes las visitas a sus museos como el de Almagruz y su Centro de Interpretación Troglodita en la localidad de Purullena, la Almazara de Paulenca, un espacio dedicado al vino en el municipio de Guadix, la casa museo Federico García Lorca en Valderrubio o la Casa Museo Manuel de Falla. Un descanso en este recorrido que también merece una parada en la Calle de la Calderería, en pleno centro de Granada, que se encuentra inundada de marroquinería y las teterías andalusíes.