En general, en la práctica totalidad de los hoteles no se borra la información de las llaves magnéticas hasta que son utilizadas para un nuevo cliente.
Hasta entonces, la llave se queda en el cajón de la recepción del hotel con la información del cliente anterior disponible para su utilización.
Hasta entonces, la llave se queda en el cajón de la recepción del hotel con la información del cliente anterior disponible para su utilización.