Los mosquitos hembras depositan sus huevos en el agua: unas especies lo hacen en agua corriente y otras en charcas de bosques, pantanos, ciénagas o estuarios. Las larvas son acuáticas y presentan, en el extremo del abdomen, un órgano, llamado sifón, que asoman hacia la superficie para tomar el oxígeno que necesitan para respirar. Tienen un aparato bucal masticador y se alimentan de partículas vegetales, detritos e incluso de pequeños animales. Los mosquitos sufren una metamorfosis completa y las larvas, que pueden vivir entre algunos días y varios meses, se transforman en la forma adulta, pasando por una breve fase de pupa. Los huevos y las larvas de los mosquitos constituyen el alimento de peces de pequeño tamaño.