Las investigadoras liliana Chelhy Nayra Lee confesaron algunos secretos para que, de la mano de los duendes, la abundancia no falte en ningún hogar:
-Enterrar tres monedas doradas, en el jardín o en una maceta.
-Colocar en la ventana una copita de miel que sólo sea para ellos.
-Atraerlos con helechos y palmeras, sus plantas preferidas.
-Llamarlos con amor, con oraciones específicas o de cualquier otra forma amable y bien intencionada. Quien no se anime a tanto, puede tenerlos como amuletos o figuras en tierra y piedra.
Como hay muchos y cada uno posee poderes específicos, lo mejor es invocarlos por su nombre. Entre otros, se encuentran Stágoros (cuida las plantas), Abaturc (protege los trabajos), Priscob (concede todos los deseos), Truppty (acude en problemas sentimentales), Sumizíuss (protector del dinero), Jurry (cuida a los niños), Igor (duende de la abundancia).
-Enterrar tres monedas doradas, en el jardín o en una maceta.
-Colocar en la ventana una copita de miel que sólo sea para ellos.
-Atraerlos con helechos y palmeras, sus plantas preferidas.
-Llamarlos con amor, con oraciones específicas o de cualquier otra forma amable y bien intencionada. Quien no se anime a tanto, puede tenerlos como amuletos o figuras en tierra y piedra.
Como hay muchos y cada uno posee poderes específicos, lo mejor es invocarlos por su nombre. Entre otros, se encuentran Stágoros (cuida las plantas), Abaturc (protege los trabajos), Priscob (concede todos los deseos), Truppty (acude en problemas sentimentales), Sumizíuss (protector del dinero), Jurry (cuida a los niños), Igor (duende de la abundancia).