El domingo pasado, leyendo un artículo de Pérez-Reverte me enteré de la condena que una juez le echó a un cívico ciudadano por defender a una mujer que estaba siendo agredida por un individuo (su pareja): 3 meses de cárcel y 15.000 €. Tal como están las cosas (o como Neira o vapuleado por toda una juez) lo mejor será hacer como en aquel chiste:
Vi que cuatro le estaban dando una somanta palos a uno y pensé, me meto o no me meto. Total, que me metí y no veas cómo lo pusimos entre los cinco. Un saludo.
Vi que cuatro le estaban dando una somanta palos a uno y pensé, me meto o no me meto. Total, que me metí y no veas cómo lo pusimos entre los cinco. Un saludo.