El espiritu de un feto podría ser transmitido por quién se lo come
En el hermano país de Taiwán se habría identificado inescrúpulosos que estarían comercializando con fetos y bebes fallecidos, los mismos que serían usados para prepararlos a la parrilla.
Se cree, que aquellas personas que practican las artes oscuras, estarían utilizando el canibalismo de fetos o bebes recién nacidos muertos preparados a la parrilla, para curar a quienes no encuentra paz espiritual, y acuden a estos.
Este ritual según algunos entendidos representa la absorción de la pureza de espíritu y alma, por ello la demanda de estos fetos y bebes recién nacidos, habrían ido en aumento.
Se ha encontrado nueva y reciente información en la red acerca de posibles aberraciones de la humanidad que estarían comercializando los fetos muertos, los mismos que en vez de ser destinados a estudios científicos, a la fecha, en Taiwan serían destinados a terminar en la parrila de alguien y finalmente en una mesa servidos como aperitivos o como platos de fondo.
Este es un hecho real, por ello las autoridades deben velar por los intereses sociales y de inmediato tomar cartas en este tema, pues resulta imperante que se deje de practicar esta forma de canibalismo, pues de continuar en boga estas costumbres esta atentaría directamente a la humanidad, pues los flancos mas importantes de aquellos inescrupulosos serían las mujeres embarazadas a nivel mundial.
Se dice que esto empezó, cuando gente que no tiene nombre comenzó a cocinar a los fetos productos de abortos en embarazados ya avanzados.
En un primer inicio se dedujo que esta clase de grupo cerrado que se forjo en Taiwan, habrían tenido la creencia que comiendo estos fetos estarían transmitiendo para sí la pureza de sus almas.
En el hermano país de Taiwán se habría identificado inescrúpulosos que estarían comercializando con fetos y bebes fallecidos, los mismos que serían usados para prepararlos a la parrilla.
Se cree, que aquellas personas que practican las artes oscuras, estarían utilizando el canibalismo de fetos o bebes recién nacidos muertos preparados a la parrilla, para curar a quienes no encuentra paz espiritual, y acuden a estos.
Este ritual según algunos entendidos representa la absorción de la pureza de espíritu y alma, por ello la demanda de estos fetos y bebes recién nacidos, habrían ido en aumento.
Se ha encontrado nueva y reciente información en la red acerca de posibles aberraciones de la humanidad que estarían comercializando los fetos muertos, los mismos que en vez de ser destinados a estudios científicos, a la fecha, en Taiwan serían destinados a terminar en la parrila de alguien y finalmente en una mesa servidos como aperitivos o como platos de fondo.
Este es un hecho real, por ello las autoridades deben velar por los intereses sociales y de inmediato tomar cartas en este tema, pues resulta imperante que se deje de practicar esta forma de canibalismo, pues de continuar en boga estas costumbres esta atentaría directamente a la humanidad, pues los flancos mas importantes de aquellos inescrupulosos serían las mujeres embarazadas a nivel mundial.
Se dice que esto empezó, cuando gente que no tiene nombre comenzó a cocinar a los fetos productos de abortos en embarazados ya avanzados.
En un primer inicio se dedujo que esta clase de grupo cerrado que se forjo en Taiwan, habrían tenido la creencia que comiendo estos fetos estarían transmitiendo para sí la pureza de sus almas.