Se celebraban los rituales utilizando comunmente un altar trapezoidal de metro o metro diez de altura y cuatro metros de largo, a fin de poder sostener comodamente a la joven sacrificada. Al parecer en algunas ocasiones no se podian cumplir estos requisitos y estaba permitida la improvisacion, aunque quedaba bien especificado que si se usaba a una mujer como altar, debian de colocarse los demas instrumentos al alcance comodo del "Oficiante".