En la China milenaria, el trabajo de los medicos no era curar a los enfermos, sino mas bien mantenerlos sanos. En consecuencia, sus pacientes les pagaban cuando estaban sanos, y dejaban de pagarles cuando enfermaban. Cuando un paciente moria, la familia del difunto
colgaba una lampara en la puerta de la casa del doctor; si habia demasiadas lamparas encendidas, el negocio iria mal.
colgaba una lampara en la puerta de la casa del doctor; si habia demasiadas lamparas encendidas, el negocio iria mal.