FREILA: En el otro extremo de estos boidos esencialmente terrestres...

En el otro extremo de estos boidos esencialmente terrestres están las cuatro especies del género Corallus, muy adaptadas a la vida arbórea en las selvas tropicales gracias a su potente cola prensil, a sus formas esbeltas y a sus fosetas labiales que les permiten detectar térmicamente los mamíferos arborícolas. Adaptaciones similares, pese a que su cola prensil es algo más corta, muestra la boa arbórea de Madagascar, que, por lo demás, frecuenta hábitats bastante diversos, no necesariamente forestales. Otras boas muy adaptadas a la vida arbórea son la boa de las enredaderas de la Española y, obviamente, la boa arbórea del Pacífico.
Curiosamente, la boa constrictor no es una serpiente arborícola. Principalmente terrestre, trepa a los árboles con movimientos lentos y constantes, y suele cazar en el suelo con una técnica de emboscada. Por lo demás, este reptil no sólo se encuentra en los bosques tropicales húmedos, las sabanas y las plantaciones de caña de azúcar –sus hábitats preferidos-, sino también en zonas de monte bajo rocosas y semidesérticas.