Un tio coge el ascensor en su casa, al pasar por el tercero, entra un enano el enano le da un pellizco en el moflete y le dice:
- ¡Hola cabroncete!
El tio se queda mosqueado, al dia siguiente vuelve a coger el ascensor, y en el tercero entra otra vez el enano, le pellizca otra vez y le vuelve a decir:
- ¡Hola Cabroncete!
Esto se repite en dias sucesivos, entonces decide contárselo a la mujer, la mujer le dice:
- Manolo no hagas caso, es un pobre hombre, ten en cuenta su estatura y tu eres muy fuerte.
Al dia siguiente vuelve a entrar el enano en el mismo piso le coge el moflete y le dice:
- Hola Cabroncete, y ¡además Chivatillo!
- ¡Hola cabroncete!
El tio se queda mosqueado, al dia siguiente vuelve a coger el ascensor, y en el tercero entra otra vez el enano, le pellizca otra vez y le vuelve a decir:
- ¡Hola Cabroncete!
Esto se repite en dias sucesivos, entonces decide contárselo a la mujer, la mujer le dice:
- Manolo no hagas caso, es un pobre hombre, ten en cuenta su estatura y tu eres muy fuerte.
Al dia siguiente vuelve a entrar el enano en el mismo piso le coge el moflete y le dice:
- Hola Cabroncete, y ¡además Chivatillo!