La actividad de los poltergeists tiende a ocurrir en torno a una sola persona, llamada “agente” o “foco”. A menudo se trata de niños en edad de pubertad. Casi setenta años de investigación efectuado por el Centro de Investigaciones del Rin, en Raleigh-Durham, Carolina del Norte, han conducido a una hipótesis -compartida entre la mayoría de los parapsicólogos- de que el “efecto poltergeist” es una forma de psicokinesis generada por una mente humana viva: la del propio agente.