Aproximadamente, una manada de ganado en transporte llegaba a 3000 cabezas. Para arrearlo se necesitaba un equipo de 10 vaqueros por lo menos, con tres caballos por vaquero. Los vaqueros trabajaban por turnos para cuidar al ganado las 24 horas del día, arreándolo en la dirección correcta durante el día y vigilándolo en la noche para prevenir estampidas y robos. El equipo también incluía un cocinero, y un wrangler para que se encargara de los remuda. El wrangler del transporte generalmente era un joven cowboy o alguien de clase social baja, pero el cocinero era un miembro muy respetado del equipo, ya que no sólo estaba a cargo de la comida, también se encargaba de los suministros médicos y tenía ciertos conocimientos de medicina práctica.