A causa del tiempo y la habilidad física necesaria para desarrollar ciertos requisitos, los vaqueros a menudo comienzan su carrera en la adolescencia, y ganan sueldos cuando tienen las habilidades suficientes para ser contratados. Si no resultan heridos, manejan ganados o caballos por el resto de su vida laboral. En los EEUU algunas mujeres asumieron estas tareas, pero las vaqueras no recibieron demasiado reconocimiento hasta fines del siglo XIX. Actualmente, en los ranchos del oeste, los vaqueros generalmente son adultos. La responsabilidad de pastorear al ganado ya no se considera apropiada para jóvenes. A ellos se les otorga las tares en el rancho cuando están en los últimos años de adolescencia, y llevan a cabo trabajos que requieren un nivel de madurez y responsabilidad que no se encuentra usualmente en sus pares urbanos.