EN LA BIBLIA HEBREA
Satán debe ser entendido como "acusador" o "adversario", aunque este término se aplica tanto a entidades sobrenaturales como a los seres humanos.
Remontándonos a su etimología, el vocablo “Satán”, en hebreo, deriva de la raíz que significa “el que se opone”, “el que es adverso” o “el que actúa de manera contraria”.
Satán debe ser entendido como "acusador" o "adversario", aunque este término se aplica tanto a entidades sobrenaturales como a los seres humanos.
Remontándonos a su etimología, el vocablo “Satán”, en hebreo, deriva de la raíz que significa “el que se opone”, “el que es adverso” o “el que actúa de manera contraria”.