Total, PEPEPACO, que allí estuvimos leyendo “las pruebas del delito” y después el teniente me preguntó por ti y por Antonio, que si os conocía.
-A PEPEPACO, sí, le respondí, casi todos los días lo veo por el foro de Deza. Al Antonio no lo he visto nunca por allí.
Y allí estuvimos todos leyendo los mensajes, y no veas, PEPEPACO, lo que disfrutaron los civiles, sobre todo con tus chistes. ¡Cómo se descojonaban de risa! Ya más relajados todos, les pregunté si me iba a pasar algo. Yo todavía algo
... (ver texto completo)
¡Qué alegría, PEPEPACO, que alegría!
Estaba en la cama vuelto de espaldas, y digo vuelto porque estaba vuelto, y va mi mujer y me toca en el hombro y me dice:
-Manuel, ¿qué soñabas, que estabas hablando del
foro, de médicos, de los civiles…?
-?
-Pues vaya nochecita con la palanca, que si no entra bien, que si rasca la caja de cambios…
- ¿¡?
¡Todo ha sido un sueño, PEPEPACO!
(Me voy a tener que tomar un año sabático con los
foros, PEPEPACO)
Saludos.