FREILA (Granada)

El Negratín desde la Cuesta del Pino
Foto enviada por PEPEPACO

si señor, eso mismo me pasó una vez
pues entonces, ya sabes, cuando vayas otra vez, te puedes encaramar en lo alto de la cuesta y probar, supongo que deben salir.
y estas las tuve que recortar para poder mandarlas.
Me las devolvía popr ser grandes, eso creo que te pasó a ´ti una vez ¿no?
si señor, eso mismo me pasó una vez
pero no es muy buena, no se si de tan lejos saldran las fotos tan bien
y estas las tuve que recortar para poder mandarlas.
Me las devolvía popr ser grandes, eso creo que te pasó a ´ti una vez ¿no?
¿porqué no?
¿es que solo te sirve para fotos de cerca?
pero no es muy buena, no se si de tan lejos saldran las fotos tan bien
esas estaran hechas con una buena cámara porque la que yo tengo no creo que se puedan hacer
¿porqué no?
¿es que solo te sirve para fotos de cerca?
y esta también.
esas estaran hechas con una buena cámara porque la que yo tengo no creo que se puedan hacer
y esta también.
100 calorías impulsarían una bicicleta durante 3 millas (4,8 Km) y a un coche durante 280 pies (85 metros).
Los científicos indicaron que la desaparición de salamandras afectó en mayor medida a las que vivían en tierra firme frente a las que lo hacen en los árboles
Según los científicos, los últimos datos recogidos en 2005 y 2007 indicaron que no había ejemplares de Pseudoeurycea brunnata y P. goebeli, cuya existencia había sido constatada en 1970.
Las salamandras sin pulmones, que respiran a través de la piel, representan un 65 por ciento de todas las especies de ese anfibio en el mundo.
En un censo de salamandras realizado en el sur de México, Wake y sus colegas descubrieron que dos tipos de esos anfibios que carecen de pulmones (Plethodontidae) se habían extinguido y que otros marcaban una abrupta declinación en relación con datos recogidos en la década de 1970.
David Wake, de la Universidad de California y sus colegas de la Universidad Nacional Autónoma de México y de la Universidad San Carlos, de Guatemala, indicaron en el estudio que el fenómeno no se puede explicar solamente a través de una destrucción del hábitat.
En el caso de Estados Unidos, la desaparición de ranas y sapos ha sido atribuida a una enfermedad fungal causada por el patógeno Batrachochytrium dendrobatidis.
Aun cuando nunca se ha precisado la razón de las desapariciones de anfibios, muchos científicos han indicado que se debe a la contaminación ambiental, tanto del aire como de las aguas, que son el hábitat principal de esos animales.