Hickory Daily Record, 21 de diciembre de 1992
Ken Barger, de 47 años, se disparó accidentalmente y murió en Newton, Carolina del Norte,
EEUU, cuando, al despertarlo el sonido del teléfono al lado de su cama, trató de alcanzar el teléfono pero en vez de eso cogió una Smith & Wesson 38 Especial, la cual se disparó cuando Ken se la acercó al oído.