BAUL: Si soy el nieto de Carmelo y Margarita, me encantan...

Cuantos años los niños y niñas jugábamos todos los días en Baúl, la alegría la llevábamos dentro, una vez instalada la TONTA, poco a poco, éramos pocos los que salíamos a jugar, los que nos hervían la sangre, los que estábamos enamorados hasta las cachas, ese esperarlo si es que lo dejaban, había que echarle a los cerdos, llevar el agua, ni la escuela, ni el jugar, hasta el estar enamorado le estaba vedado, mas cuando el amor es tan GRANDE. Nadie pudo con ninguno de los dos. Gracias a quien me lo haya hecho llegar, eso de que en Baúl, este verano se ha jugado. Que cunda el ejemplo, y me sigan contando que los pocos o muchos niños y niñas de Baúl están jugando. ¡Que alegría!

Pues Teresa este año ha sido increíble nos lo hemos pasado en grande jugando y estando todos los dias juntos hechando unas risas. Por las mañanas nos ibamos a la plaza ha estar todos juntos y hablar y reir, por las tardes nos ibamos a la pista a jugar partidos de futbol y por las noches nos ibamos al muelle a hablar tan agusto con la luz de la luna y las estrellas, ha sido fantástico. Me dijiste en un mensaje que ibas a venir pero no te ehe visto

Si que iré pero será a mediados de setiembre, con el calor que hemos padecido, viajar para mí hubiera sido empeorar (Si al menos me hubiera ido a las alturas, con él) sin dudarlo, le hubiera dado la matraca a mí hijo y me hubiera llevado, pero darle más guerra, bastante tiene ya, con atenderme, trabajar con responsabilidad, hay días que viene a comer a las 6 de la tarde, si se rompen las redes, los que van al paro, hasta que no las arreglan no se viene, ya que tendrían un día menos de paro, y él como su padre es todo honradez, no va de chulo por la vida, pero hacer el bien es otro As en mi vida, lo quieren todos, los compañeros, la gente, le querían regalar, y se opuso tajantemente, señora, tan solo he cumplido con mi deber, y mi deber es hacerle a UD. las cosas tal y como marca la ley, se lleva a la gente de calle, el un calco de su PADRE. Que todo el año, los que quedéis ahí no, dejéis de jugar, aunque estéis solo dos, la de cosas que podéis aprender con tan solo bajar el Cejo, cada día inventábamos cosas nuevas, tanto si nevaba como si no, no nos tenían presos unas maquinitas que han hecho para entontecer al personal, el muelle, la de recuerdos que me trae, allí me llevaba una mesita, y hacia los deberes, un día el Sergio de Juan el del tío Lázaro, me tiro una piedra, no veáis la brecha que me abrió en la coronilla, sin anestesia alguna, Don Paco, me ponía las lañas estas saltaban, y no solté ni un ¡Ay! pero cuando se entero mi amor, lo busco y le dio para el pelo, paliza, de las de todos los días, se llevó, siempre había un porque para pegarle con la hebilla del cinturón, fuimos felices y a la vez lo contrario, hoy me llamo cobarde, por no haber hecho lo que tenía que hacer, la inocencia que por aquel entonces teníamos los niños, todo era pecado, acaso salvar una vida lo es? NO, NO, NO... ¡Que noches aquellas del verano! en invierno no nos quedábamos atrás, nevaba, íbamos, le pedíamos cajas del tabaco a Agustín Galindo, con ellas nos hacíamos los trineos para bajar al río (El peligro estaba latente) pero hacer muñecos de nieve, y guerrillas con la misma, ¡Qué disfruté Dios Mío! No sé, si eres el nieto de Carmelo y Margarita o tal vez el Pimo, quien quiera que sea, le doy mil gracias. Os quiere. Teresa

Si soy el nieto de Carmelo y Margarita, me encantan las historias que cuentas por aquí, saludos