Con contrincantes así
da gusto tirarse al ruedo.
Con hombres de esta cordura,
no solo no se siente miedo.
Sino que es un honor sin duda
perder en el entrevero.
da gusto tirarse al ruedo.
Con hombres de esta cordura,
no solo no se siente miedo.
Sino que es un honor sin duda
perder en el entrevero.