Don Ginés: cuantos recuerdos me vienen a la memoria estas fotos, cuando había llovido íbamos por esos llanos a buscar “serranas” en aquellos tiempos había bastantes hoy por lo que tengo entendido casi en estado de extinción, y pasar antes de amanecer para ir al Carnaje y preguntaba a mi padre ¿Qué pájaros eran los que se sentían a nuestro paso por aquellos llanos? Ramón son chorlitos y avefrias que vienen a dormir por aquí, durante el día no los verás y así era nunca los vi. Por cierto en el Carnaje años sesenta aún habían en el cerro Los Lobos hasta medio pecho dos cables con dos especies de vagonetas colgando pero muy deterioradas por el óxido, se veía el cerro a través de ellas de rotas que estaban y el embarcadero en el centro de la playa hecho con postes cilíndricos de madera clavados en el fondo y de la plataforma lo único que quedaba eran los travesaños de hierro que algún día habrían hecho de base al suelo de madera ¡supongo! Aún quedaban restos de un gran montón de adoquines a la izquierda que los temporales se encargaron año tras año de arrastrarlos mar adentro.
Nota, “serrana” tipo de caracol algo mas grande de lo normal de carne exquisita que solo se da por nuestra tierra.
Un saludo.
Nota, “serrana” tipo de caracol algo mas grande de lo normal de carne exquisita que solo se da por nuestra tierra.
Un saludo.
Don Ramón: a propósito de la información que nos aporta de los adoquines del Carnaje, para mí siempre de un gran valor histórico por ser testigo con su prodigiosa memoria de la vida de este paraíso. Cuando hice el estudio histórico de las canteras de adoquines me fijé en un mapa histórico de la Cartoteca Nacional de 1956 donde aparece perfectamente detallado el tendido de los cables de las vagonetas para transportar los adoquines de la cantera próxima a la Torre de Los Lobos, justo en la vertical del Puntazo de Piedra Negra hasta el embarcadero artificial de la Cala del Carnaje. En su inicio el tendido hacía una curva en el lugar donde debieron estar las 2 construcciones que ya mencioné y luego se hacía rectilíneo en el tramo recto de mayor longitud con hasta 5 postes, tres de ellos equidistantes entre sí y el último tramo recto más corto en la llegada a la cala con 2 postes. Se distinguen perfectamente también los caminos de acceso; uno desde el Cortijo Colorao hasta la cantera y el otro hasta la cala. Desde la cantera se comunicaba también con la cala y también se accedía a las proximidades del Puntazo de Piedra Negra. El camino entonces no accedía a la cota 263 de la Torre de los Lobos. Eso cuentan los planos.