DIARIO DE NAVARRA, 7 DE JUNIO DE 2009.
"DESD´EL GALLO DE SAN CERNIN"
OLLARRA (JOSÉ JAVIER URANGA)
Reflexión en Ujué
AYER, día de reflexión, subí a Ujué con un amigo a meditar. Mañana blanda de primavera con el cielo torturado. Ribera abajo, los verdes crecidos por las lluvias invernales
dominan sobre los ocres del cereal que madura. La Virgen no está en su pilar, pero el ábside del templo penetra en la
historia hasta Roma. Conocíamos a Lecubegis, divinidad indígena con cabeza de toro, pero las piedras descubiertas del oratorio romano honrarían a un dios o diosa del Capitolio oriundo del Olimpo. Sobre ellas se construyó,
en los siglos IV-V una iglesia cristiana y, más arriba, otra prerrománica de cabecera plana, y en lo alto los tres ábsides de Sancho Ramírez prolongados en el gótico por Carlos III. En el siglo IX, según fuentes árabes, el castillose llamaba Santa María y era “el primero y más importante del Reino de Pamplona”. La Virgen, arropada por su
hermana Santa María de Pamplona, seguirá en la Catedral hasta que acaben las obras de restauración. Le han colgado
una cinta con su medalla para que le besen sus devotos, y una pequeña consola-tragaperrascon luces, modelo USA. No le faltan flores que, en pequeños ramos, le acercan entre las rejas.
La iglesia deUjué está con andamios hasta lo más alto de las
bóvedas, el pavimento levantado y la perspectiva de un año detrabajo. La obra más necesaria se realizó anteriormente entejados, torres y terrazas, consolidando piedras, cambiando vigasy haciendo posible una visita muy interesante por encima del paseo de ronda y de los ábsides románicos. No está decidido si se van a enlucir las paredes o dejarlas en su ser. Yo pienso, y quizá piense mal que, si se blanquean o pintan, dentro de unos años, ¿quince, veinte?, las volverán a rascar y dejarán al aire los sillarejos.
Una pequeña réplica de la imagen, bien lograda, preside el
ámbito parroquial, improvisado en la arcada norte de la ronda.
Ante ella me pongo a reflexionar porque hoy es el día. Y pienso en los milagros, no sólo en los atribuidosa Santa María de Ujué, que tiene en su haber favores y mercedes reconocidos. Pedro IV de Aragón asegura que obra muchos
milagros. Y doña Leonor, heredera de Navarra, eleva el
número al infinito.
No sólo nuestra Virgen hace milagros. Hay milagros laicos.
La Sra. Leire Pajín se dirige “a todos los seres humanos”: “les suplico que estén atentos al próximo
acontecimiento histórico que se producirá en nuestro planeta”.
¿Vendrá un desastre apocalíptico o terminará la crisis
agravada por Zapatero? Anuncia“una esperanza paramuchos
seres humanos”. Tras tanta parafernalia en el prólogo, viene la noticia: “la coincidencia en breve de dos liderazgos progresistasa ambos lados del Atlántico
Obama y lapresidencia de Zapateroen la Unión Europea”. ¿Conjunciónastrológica con Obama? Tampoco. Se trata de oca a oca yme toca. Le toca a España presidirla UE y Zapatero será la oca.
En esto pensaba mirando al monasterio de Leire con fondo
de nieves pirenaicas. Me olvidéde SantaMaría y repasé la igualdadde sexos socialistas empezandopor las ministras, desdeMaleni de los túneles y la nievede Siberia, hoy ya en Europa, hasta Aido definiendo el ser comoun Kant cualquiera, y Chacónmintiéndonos en la retirada de Kosovo y callando la gripe en los cuarteles, mientras Jiménezcolaboraba con su silencio. En el equipo el Vice Chaves, una especie
de virrey de Andalucía con más poderes, eso sí democráticos,
que el general Queipo de Llano; y José Blanco utilizando
la seguridad de Aznar en mítines políticos. Hasta Rubalcaba
le exige respeto.
Yo pienso que, salvando las personas, un cristiano, malo o
bueno, tiene perfecto derecho, e incluso la obligación, de criticar la cosa pública y al hombre voluntariamente público, si cree hacerlo en bien de la comunidad.
La Virgen de Ujué está ahí para que le pidamos lo que se
nos ocurra y nos convenga. No creo que apruebe el aborto a plazo, ni el adoctrinamiento escolar, ni la inquina contra la Iglesia.
Frente a la realidad nacional nos quedan dos cosas: pedir a
quienes pueden arreglarnos protestar hasta el pataleo.
"DESD´EL GALLO DE SAN CERNIN"
OLLARRA (JOSÉ JAVIER URANGA)
Reflexión en Ujué
AYER, día de reflexión, subí a Ujué con un amigo a meditar. Mañana blanda de primavera con el cielo torturado. Ribera abajo, los verdes crecidos por las lluvias invernales
dominan sobre los ocres del cereal que madura. La Virgen no está en su pilar, pero el ábside del templo penetra en la
historia hasta Roma. Conocíamos a Lecubegis, divinidad indígena con cabeza de toro, pero las piedras descubiertas del oratorio romano honrarían a un dios o diosa del Capitolio oriundo del Olimpo. Sobre ellas se construyó,
en los siglos IV-V una iglesia cristiana y, más arriba, otra prerrománica de cabecera plana, y en lo alto los tres ábsides de Sancho Ramírez prolongados en el gótico por Carlos III. En el siglo IX, según fuentes árabes, el castillose llamaba Santa María y era “el primero y más importante del Reino de Pamplona”. La Virgen, arropada por su
hermana Santa María de Pamplona, seguirá en la Catedral hasta que acaben las obras de restauración. Le han colgado
una cinta con su medalla para que le besen sus devotos, y una pequeña consola-tragaperrascon luces, modelo USA. No le faltan flores que, en pequeños ramos, le acercan entre las rejas.
La iglesia deUjué está con andamios hasta lo más alto de las
bóvedas, el pavimento levantado y la perspectiva de un año detrabajo. La obra más necesaria se realizó anteriormente entejados, torres y terrazas, consolidando piedras, cambiando vigasy haciendo posible una visita muy interesante por encima del paseo de ronda y de los ábsides románicos. No está decidido si se van a enlucir las paredes o dejarlas en su ser. Yo pienso, y quizá piense mal que, si se blanquean o pintan, dentro de unos años, ¿quince, veinte?, las volverán a rascar y dejarán al aire los sillarejos.
Una pequeña réplica de la imagen, bien lograda, preside el
ámbito parroquial, improvisado en la arcada norte de la ronda.
Ante ella me pongo a reflexionar porque hoy es el día. Y pienso en los milagros, no sólo en los atribuidosa Santa María de Ujué, que tiene en su haber favores y mercedes reconocidos. Pedro IV de Aragón asegura que obra muchos
milagros. Y doña Leonor, heredera de Navarra, eleva el
número al infinito.
No sólo nuestra Virgen hace milagros. Hay milagros laicos.
La Sra. Leire Pajín se dirige “a todos los seres humanos”: “les suplico que estén atentos al próximo
acontecimiento histórico que se producirá en nuestro planeta”.
¿Vendrá un desastre apocalíptico o terminará la crisis
agravada por Zapatero? Anuncia“una esperanza paramuchos
seres humanos”. Tras tanta parafernalia en el prólogo, viene la noticia: “la coincidencia en breve de dos liderazgos progresistasa ambos lados del Atlántico
Obama y lapresidencia de Zapateroen la Unión Europea”. ¿Conjunciónastrológica con Obama? Tampoco. Se trata de oca a oca yme toca. Le toca a España presidirla UE y Zapatero será la oca.
En esto pensaba mirando al monasterio de Leire con fondo
de nieves pirenaicas. Me olvidéde SantaMaría y repasé la igualdadde sexos socialistas empezandopor las ministras, desdeMaleni de los túneles y la nievede Siberia, hoy ya en Europa, hasta Aido definiendo el ser comoun Kant cualquiera, y Chacónmintiéndonos en la retirada de Kosovo y callando la gripe en los cuarteles, mientras Jiménezcolaboraba con su silencio. En el equipo el Vice Chaves, una especie
de virrey de Andalucía con más poderes, eso sí democráticos,
que el general Queipo de Llano; y José Blanco utilizando
la seguridad de Aznar en mítines políticos. Hasta Rubalcaba
le exige respeto.
Yo pienso que, salvando las personas, un cristiano, malo o
bueno, tiene perfecto derecho, e incluso la obligación, de criticar la cosa pública y al hombre voluntariamente público, si cree hacerlo en bien de la comunidad.
La Virgen de Ujué está ahí para que le pidamos lo que se
nos ocurra y nos convenga. No creo que apruebe el aborto a plazo, ni el adoctrinamiento escolar, ni la inquina contra la Iglesia.
Frente a la realidad nacional nos quedan dos cosas: pedir a
quienes pueden arreglarnos protestar hasta el pataleo.
