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UJUE: UJUé-UXUE Y LOS REYES NAVARROS....

UJUé-UXUE Y LOS REYES NAVARROS.

El santuario de Ujué, centro de la detvoción mariana de los reyes a partir de la dinastía de Evreux y en relación con el cercano palacio: residencia de Olite.

- Carlos II ya tenía fundada aquí una capellanía en 1361.

En 1364, Luis de Beaumont, hijo de, Felipe de Evreux y Juana II (l328-l349), acompañado de su esposa de su séquito, peregrinó en romería a Ujué. La comitiva salió de Pamplona el 27 de julio, pasando por Tiebas y Solchaga, continuando al día siguiente por Amatriain y San Ginés (monasterio desaparecido, cuyas ruinas subsisten en el
Alto de Lerga) y llegando, a Ujué por la tarde.

- La reina doña Juana salió del reino en 1373 con una importante misión diplomática. Antes de partir, dio la orden de que se mantuviera encendida ante Sta. María de Ujué una lámpara de plata regalada por ella.

En su testamento, Carlos II (murió el 1 de enero de 1387),
dispuso que su corazón fuera depositado én Ujué. El judío zaragozano Samuel Trigo lo extrajo e introdujo en un pichel de estaño soldado, que fue llevado al santuario, donde se celebraron solemnes exequias en mayo.

Carlos III el Noble (1387-1425) visitó frecuentemente este enclave mariano. Cuando su esposa Leonor de Castilla quedó postrada en cama, Carlos envió un obsequio de cera y una limosna para obtener de la Virgen la salud de la reina. El mismo monarca había encargado en 1412 un libro de Horas de Sta. María al iluminador Johan Clemens, quien recibió
seis florines por su trabajo. Tras su convalecencia, doña
Leonor pasó una temporada en Castilla, y a su regreso acudió a Ujué con el rey y las infantas, ofreciendo un precioso cáliz realizado por Fernando de Sepúlveda
(actualmente en el Museo de Navarra). Salieron desde Olite y viajaron a pie, pernoctando en tiendas de campaña.

Doña Blanca (1425-1441) marçhó en septiembre de 1415 a Ujué,
donde ofreció como presente una corona de oro. Otra pieza similar, guarnecida de zafiros y perlas fue el regalo que hizo a la Virgen de Ujué como recuerdo de su boda con Juan II de Aragón.

En 1424, el Príncipe de Viana, un niño de tres años, llevó al santuario un manto de paño de oro; un frontal y otras bellas piezas. Tras su matrimonio con Inés de Cleves (30 de septiembre de 1434), acudieron en comitiva desde Olite a Ujué. Su madre doña Blanca, crea dora de la Orden del Pilar, ordenó en él testamento. (17 de febrero de 1439) ser enterrada en Sta. María de Ujué. No pudo cumplirse
su voluntad, al morir en Castilla. Fue inhumada en Sta. Maríá de Nieva (Segovia) y nadie cuidó de señalar especialmente su sepultura, ni del traslado de sus restos a
Ujué. Posteriormente, su hija Leonor dispuso que se Ilevaran a Ntra. Sra. de la Misericordia de Tafalla, pero este proyecto tampoco se realizó.