Hemos estado éste fin de semana visitando Navarra, ya que queríamos conocer los Parques Naturales de Lókiz y Urbasa, especialmente para ver los coloridos de los hayedos, ya que nos comentaros unos amigos de Madrid que habían estado en Agosto, y nos dijeron que en Urbasa había extensos bosques de hayas de formas variadas.
La verdad que nos ha sorprendido bastante la belleza de lo que hemos visto éste fin de semana. Nos llevaron a ver dos bosques preciosos, con numerosas hayas, musgo y hojarasca. Lo que más nos ha sorprendido ha sido, aparte de la espectacular belleza y colorido de los hayedos, que estaban con unas tonalidades amarillas – anaranjadas espectaculares, es la tranquilidad existente en éstos lugares, cosa chocante para nosotros, ya que esperábamos encontrarnos bastante gente como por ejemplo en el Parque Natural de Ordesa o en la Sierra de Guadarrama en Madrid.
Una de las cosas que más nos sorprendió fue, disfrutar de la grandiosidad del Bosque del Hayedo de Piedras. En éste bosque hay numerosas figuras de piedras con diferentes formas cubiertas de musgo rodeadas en un ambiente muy húmedo que a mí me daba la sensación de estar en otro mundo, ya podía ver paisajes que no conocía además de respirar aire puro y disfrutar del olor a humedad y no a gasolina como tengo que hacer cada día.
Nos sorprendió que lugares tan preciosos como éste ni se conozcan y sin embargo otros sitios de mucho menos interés te los venden como algo maravilloso, ejemplo de ello la ciudad encantada de Cuenca, que no tienen ni mucho menos la belleza y el interés que tiene éste Bosque de Hayas del Parque Natural de Urbasa.
También nos dio tiempo de visitar el Parque Natural de Lókiz, y subimos hasta la Basílica – Ermita de Santiago de Lókiz. Esta basílica está situada a 950 metros de altura, sobre el cresterío de rocas que configuran la sierra.
Este parque de Lókiz es diferente al de Urbasa, pero tiene no la ventaja de que es una zona ideal para realizar numerosas rutas de senderismo de todos los niveles, especialmente en las épocas de Otoño, Invierno y Primavera.
Nos gustó mucho a pesar de conocer poco del mismo, pero la belleza de las rocas iluminadas por el sol de otoños, en contraste con el color grisáceo de las nubes le daban un toque de hermosura que a mí particularmente me gustó.
La verdad que después de conocer éstos dos entornos naturales, volveremos el año que viene a conocerlos más a fondo y desde aquí quiero recomendaros que vengáis a visitarlos porqué seguro que os gustaran.
Yo particularmente se los voy a recomendar a mis amigos de Madrid, que tanto anhelan de belleza, naturaleza y tranquilidad.
Fátima.
La verdad que nos ha sorprendido bastante la belleza de lo que hemos visto éste fin de semana. Nos llevaron a ver dos bosques preciosos, con numerosas hayas, musgo y hojarasca. Lo que más nos ha sorprendido ha sido, aparte de la espectacular belleza y colorido de los hayedos, que estaban con unas tonalidades amarillas – anaranjadas espectaculares, es la tranquilidad existente en éstos lugares, cosa chocante para nosotros, ya que esperábamos encontrarnos bastante gente como por ejemplo en el Parque Natural de Ordesa o en la Sierra de Guadarrama en Madrid.
Una de las cosas que más nos sorprendió fue, disfrutar de la grandiosidad del Bosque del Hayedo de Piedras. En éste bosque hay numerosas figuras de piedras con diferentes formas cubiertas de musgo rodeadas en un ambiente muy húmedo que a mí me daba la sensación de estar en otro mundo, ya podía ver paisajes que no conocía además de respirar aire puro y disfrutar del olor a humedad y no a gasolina como tengo que hacer cada día.
Nos sorprendió que lugares tan preciosos como éste ni se conozcan y sin embargo otros sitios de mucho menos interés te los venden como algo maravilloso, ejemplo de ello la ciudad encantada de Cuenca, que no tienen ni mucho menos la belleza y el interés que tiene éste Bosque de Hayas del Parque Natural de Urbasa.
También nos dio tiempo de visitar el Parque Natural de Lókiz, y subimos hasta la Basílica – Ermita de Santiago de Lókiz. Esta basílica está situada a 950 metros de altura, sobre el cresterío de rocas que configuran la sierra.
Este parque de Lókiz es diferente al de Urbasa, pero tiene no la ventaja de que es una zona ideal para realizar numerosas rutas de senderismo de todos los niveles, especialmente en las épocas de Otoño, Invierno y Primavera.
Nos gustó mucho a pesar de conocer poco del mismo, pero la belleza de las rocas iluminadas por el sol de otoños, en contraste con el color grisáceo de las nubes le daban un toque de hermosura que a mí particularmente me gustó.
La verdad que después de conocer éstos dos entornos naturales, volveremos el año que viene a conocerlos más a fondo y desde aquí quiero recomendaros que vengáis a visitarlos porqué seguro que os gustaran.
Yo particularmente se los voy a recomendar a mis amigos de Madrid, que tanto anhelan de belleza, naturaleza y tranquilidad.
Fátima.
