El hospital de pobres y peregrinos de Tui cumplió esa función hasta que se convirtió en museo. Lo que yo no sabía es que este hospital fue el depositario de unas prendas usadas para señalar, castigar y estigmatizar a unas pobres gentes que sufrieron la ira de la Inquisición. Y es que fue precisamente en una sala de este edificio donde se encontraron los “sambenitos” entre distintos trastos archivados y mucho polvo.