En la conocida como
Capilla Mayor se puede contemplar un
retablo de madera de
castaño y
nogal, de
fábrica moderna, ya que se puede datar entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, obra de
escultor gallego creador de una
escuela de talla en Santiago de Compostela, Máximo Magariños, que realizó también el
púlpito, así como catorce cuadros con bajos relieves que forman las catorce
estaciones del
Vía Crucis de la
iglesia.