Cuentan que:
Un grangero tenia un burro ya viejo y enfermo; al verlo considero que el gasto en Veterinario no valia la pena; para colmo, un mal dia el burro cayo dentro de un pozo seco y a pesar de los intentos por sacarle, fue tarea imposible, por lo mismo, el grangero ordeno que rellenasen con tierra el pozo y de ese modo solucinaba dos problemas -tapar el pozo y enterrar al burro-, sus vecinos que conocian su crueldad le reclamaron pero, la faena comenzo procediendose a tirar tierra con pala al interior del pozo, la tierra caia sobre el lomo del burro, el que, por cada palada se sacudia y pateaba el piso del pozo aprisionando -sin saber- la tierra contra el fondo; por cada palada caida sobre su lomo, el burro repetia la misma accion, de ese modo poco a poco el fondo del pozo comenzo a subir en la medida que se llenaba y, el burro al final pudo salir del pozo logrando revertir su suerte.
Muchas veces en nuestras vidas hemos -como el burro- estado en el fondo del pozo y no vemos salida, sintiendo que la vida y sus responsabilidades nos han sobre pasado, que ya no tenemos fuerza para levantarnos en nuestra caida, que el peso de las responsabilidades y la situacion de vida no dan para mas y con profunda conviccion -por experiencia vivida- os digo hay una sola y segura forma de salir del atolladero, dar la cara hasta donde sea posible y, tomados de la mano de Dios esperar las reacciones de tus oponentes, pensando siempre en no entregarte como mansa oveja; los Lobos no quedaran tranquilos hasta no verte destruido; hay que tener Fe en el pastor que no dejara a sus ovejas al descuido.
Blas
Un grangero tenia un burro ya viejo y enfermo; al verlo considero que el gasto en Veterinario no valia la pena; para colmo, un mal dia el burro cayo dentro de un pozo seco y a pesar de los intentos por sacarle, fue tarea imposible, por lo mismo, el grangero ordeno que rellenasen con tierra el pozo y de ese modo solucinaba dos problemas -tapar el pozo y enterrar al burro-, sus vecinos que conocian su crueldad le reclamaron pero, la faena comenzo procediendose a tirar tierra con pala al interior del pozo, la tierra caia sobre el lomo del burro, el que, por cada palada se sacudia y pateaba el piso del pozo aprisionando -sin saber- la tierra contra el fondo; por cada palada caida sobre su lomo, el burro repetia la misma accion, de ese modo poco a poco el fondo del pozo comenzo a subir en la medida que se llenaba y, el burro al final pudo salir del pozo logrando revertir su suerte.
Muchas veces en nuestras vidas hemos -como el burro- estado en el fondo del pozo y no vemos salida, sintiendo que la vida y sus responsabilidades nos han sobre pasado, que ya no tenemos fuerza para levantarnos en nuestra caida, que el peso de las responsabilidades y la situacion de vida no dan para mas y con profunda conviccion -por experiencia vivida- os digo hay una sola y segura forma de salir del atolladero, dar la cara hasta donde sea posible y, tomados de la mano de Dios esperar las reacciones de tus oponentes, pensando siempre en no entregarte como mansa oveja; los Lobos no quedaran tranquilos hasta no verte destruido; hay que tener Fe en el pastor que no dejara a sus ovejas al descuido.
Blas
