Asiento en la sombra de la encina, MEMBRIO

Hoy va el asunto de asientos de piedras y este nos dice que a la sombra de la encina dio descanso al labrador en la siega y al pastor cuando pasaba por estos lares con el zurrón y el garrote acompañado de mastines y careas cuidando el rebaño de ovejas.
¡Jesús, Jesús......................... . ya no existen labradores ni pastores!