ese trocito de casa que se ve si es la casa d Juan Espuela mi abuelo el padre de mi padre.... un saludo LALI...
Es alimento para el alma/psiquis volver a recordar esos lugares por los que habías jugado y hecho travesuras.
Recuerdo una anécdota graciosa que paso a contaros:
Enfrente de mi casa había el comercio de la señora Carmen la de Francisco Barbosa
Con mi madre eran muy amigas y confesoras, yo había oído muchas veces a la señora Carmen el temor de que un dia se personaran la fiscaliza (me imagino = a hacienda). Un dia y en el trayecto entre corral de castellano y Juan Espuela, dos señores bien vestidos y con cartera (viajantes/comerciales) comentaban entre si “los vamos a coger de imprevistos porque hoy no nos esperan”, yo que lo oigo salgo corriendo y llegué en un segundo! Señora Carmen la fiscalia!... a la señora se le descompuso el cuerpo, escondo esto, toco la báscula etc. etc. Justo ellos entraban yo salía camino de avisar a Claudia la de Lobero que tenia la tienda en la otra punta cerca de Fernando el cojo, pero no sin antes escuchar a la señora Carmen al verse con los señores decir “madre mía, menudo susto me ha dado el este niño”, y ya a media calle sentía que me gritaban! Niño no jodas no avises, no avises!.
Colorin colorado…vaya susto que les he dado.
Recuerdo una anécdota graciosa que paso a contaros:
Enfrente de mi casa había el comercio de la señora Carmen la de Francisco Barbosa
Con mi madre eran muy amigas y confesoras, yo había oído muchas veces a la señora Carmen el temor de que un dia se personaran la fiscaliza (me imagino = a hacienda). Un dia y en el trayecto entre corral de castellano y Juan Espuela, dos señores bien vestidos y con cartera (viajantes/comerciales) comentaban entre si “los vamos a coger de imprevistos porque hoy no nos esperan”, yo que lo oigo salgo corriendo y llegué en un segundo! Señora Carmen la fiscalia!... a la señora se le descompuso el cuerpo, escondo esto, toco la báscula etc. etc. Justo ellos entraban yo salía camino de avisar a Claudia la de Lobero que tenia la tienda en la otra punta cerca de Fernando el cojo, pero no sin antes escuchar a la señora Carmen al verse con los señores decir “madre mía, menudo susto me ha dado el este niño”, y ya a media calle sentía que me gritaban! Niño no jodas no avises, no avises!.
Colorin colorado…vaya susto que les he dado.