MADRID

Plaza Mayor III

Los bares y locales de la Comunidad de Madrid podrán recibir ayudas de hasta el 40% para remodelar sus terrazas con el fin de instalar en su exterior iluminación y calefactores para que puedan estar activas durante todo el año y no sólo en los meses de primavera y verano.

Así lo ha anunciado este jueves en rueda de prensa el vicepresidente y portavoz regional, Ignacio González, quien ha apuntado que el Gobierno autonómico destinará una partida de 600.000 euros a esta materia.

La puesta en marcha ... (ver texto completo)
El sueño del celta de Mario Vargas Llosa:
El sueño del celta. La aventura que narra esta novela empieza en el Congo en 1903 y termina en una cárcel de Londres, una mañana de 1916. Aquí se cuenta la peripecia vital de un hombre de leyenda: el irlandés Roger Casement. Héroe y villano, traidor y libertario, moral e inmoral, su figura múltiple se apaga y renace tras su muerte. Casement fue uno de los primeros europeos en denunciar los horrores del colonialismo con argumentos. De sus viajes al Congo Belga y a la Amazonía peruana quedaron dos informes memorables que conmocionaron a la sociedad de su tiempo, pues tras ellos se revelaba una verdad dolorosa: no era la barbarie africana ni amazónica la que volvía bárbaros a los civilizados europeos; eran ellos, en nombre del comercio, la civilización y el cristianismo, quienes cometían los actos más bárbaros. Estos dos viajes y lo que allí vio, cambiarían a Casement para siempre, haciéndole emprender otra travesía, en este caso intelectual, tanto o más devastadora. La que lo llevó a enfrentarse a una Inglaterra que admiraba y a militar activamente en la causa del nacionalismo irlandés. Enplena I Guerra Mundial, viajó a Berlín para conspirar contra el Reino Unido y participó en el Alzamiento de Pascua de 1916, hecho que lo llevaría finalmente prisión. También en la intimidad, Roger Casement fue un personaje múltiple: La publicación de unos diarios, de veracidad dudosa, en los últimos días de su vida, airearon unas escabrosas aventuras homosexuales que le valieron el desprecio de sus compatriotas. En este territorio que se multiplica por cinco (África, la Amazonia, Irlanda, la cárcel, el sexo), El sueño del celta describe una aventura existencial, en la oscuridad humana aparece en su estado más puro y, por tanto, más enfangado. Una novela mayor del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa. ... (ver texto completo)
Doña Inés:
Callad, por Dios, ¡oh, don Juan!,
que no podré resistir
mucho tiempo sin morir
tan nunca sentido afán.
¡Ah! Callad por compasión,
que oyéndoos me parece
que mi cerebro enloquece
se arde mi corazón.
¡Ah!, me habéis dado a beber ... (ver texto completo)
Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
tu corazón de su profundo sueño
tal vez despertará.
Pero mudo y absorto y de rodillas,
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido..., desengáñate,
nadie así te amará.
BECQUER
Doña Inés:
Callad, por Dios, ¡oh, don Juan!,
que no podré resistir
mucho tiempo sin morir
tan nunca sentido afán.
¡Ah! Callad por compasión,
que oyéndoos me parece
que mi cerebro enloquece
se arde mi corazón.
¡Ah!, me habéis dado a beber
un filtro infernal, sin duda,
que a rendiros os ayuda
la virtud de la mujer.
Tal vez poseéis, don Juan,
un misterioso amuleto
que a vos me atrae en secreto
como irresistible imán.
Tal vez Satán puso en vos:
su vista fascinadora,
su palabra seductora,
y el amor que negó a Dios.
¡Y qué he de hacer ¡ay de mí!
sino caer en vuestros brazos,
si el corazón en pedazos
me vais robando de aquí?
No, don Juan, en poder mío
resistirte no está ya:
yo voy a ti como va
sorbido al mar ese río.
Tu presencia me enajena,
tus palabras me alucinan,
y tus ojos me fascinan,
y tu aliento me envenena.
¡Don Juan! ¡Don Juan!, yo lo imploro
de tu hidalga compasión:
o arráncame el corazón,
o ámame porque te adoro.

Don Juan:
¿Alma mía! Esa palabra
cambia de modo mi ser,
que alcanzo que puede hacer
hasta que el Edén se me abra.
No es, doña Inés, Satanás
quien pone este amor en mí;
es Dios, que quiere por ti
ganarme para Él quizás.
No, el amor que hoy se atesora
en mi corazón mortal
no es un amor terrenal
como el que sentí hasta ahora;
no es esa chispa fugaz
que cualquier ráfaga apaga;
es incendio que se traga
cuanto ve, inmenso, voraz.
Desecha, pues, tu inquietud,
bellísima doña Inés,
porque me siento a tus pies
capaz aún de la virtud.
Sí, iré mi orgullo a postrar
ante el buen Comendador,
y o habrá de darme tu amor,
o me tendrá que matar.

Doña Inés:
¡Don Juan de mi corazón! ... (ver texto completo)
Poema 20

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche esta estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito. ... (ver texto completo)
Don Juan Tenorio. de Jose Zorrilla

Porque tus ojos son bellos,
porque la luz de la aurora
sube al Oriente desde ellos,
y el mundo su lumbre dora

Tus labios son un rubí,
partido por gala en dos...
Le arrancaron para ti ... (ver texto completo)
Para y óyeme ¡oh sol! yo te saludo
y extático ante ti me atrevo a hablarte:
ardiente como tú mi fantasía,
arrebatada en ansia de admirarte
intrépidas a ti sus alas guía.
¡Ojalá que mi acento poderoso,
sublime resonando,
del trueno pavoroso
la temerosa voz sobrepujando,
¡oh sol! a ti llegara
y en medio de tu curso te parara!
¡Ah! Si la llama que mi mente alumbra
diera también su ardor a mis sentidos;
al rayo vencedor que los deslumbra,
los anhelantes ojos alzaría,
y en tu semblante fúlgido atrevidos,
mirando sin cesar, los fijaría.
¡Cuánto siempre te amé, sol refulgente!
Jose de Espronceda ... (ver texto completo)
Mañana, al alba, a la hora en que el campo se haga de día

Yo me iré. Y tú, yo sé que tú me oyes.

Iré por el bosque, iré por la montaña.

No puedo estar lejos de ti mucho tiempo

Yo marcharé, los ojos fijos en mis pensamientos,
... (ver texto completo)
Don Juan Tenorio. de Jose Zorrilla

Porque tus ojos son bellos,
porque la luz de la aurora
sube al Oriente desde ellos,
y el mundo su lumbre dora

Tus labios son un rubí,
partido por gala en dos...
Le arrancaron para ti
de la corona de Dios.

De tus labios, la sonrisa,
la paz de tu lengua mana...
leve, aérea, como brisa
de purpurina mañana. ... (ver texto completo)
Soneto XVIII de Shakespeare

¿Tendré que compararte a un día de primavera? Tú tienes más hermosura y suavidad: / Ráfagas de viento agitan los preciosos brotes de mayo, / Y el préstamo del estío vence a corto plazo".
Mañana, al alba, a la hora en que el campo se haga de día

Yo me iré. Y tú, yo sé que tú me oyes.

Iré por el bosque, iré por la montaña.

No puedo estar lejos de ti mucho tiempo

Yo marcharé, los ojos fijos en mis pensamientos,
... (ver texto completo)
Soneto XVIII de Shakespeare

¿Tendré que compararte a un día de primavera? Tú tienes más hermosura y suavidad: / Ráfagas de viento agitan los preciosos brotes de mayo, / Y el préstamo del estío vence a corto plazo".
Bienestar financiero depende de la auto confianza y lo mucho que creas en ti el día de hoy. Pero con una cara brava y de seguro conseguirás lo que quieres.