Escultura en bronce de Bonaventura Ansón (Tossa de Mar, 1945), realizada en 1998, que simboliza la representación de un relevo generacional.
Se encuentra situada en el camino de acceso a la Villa Vieja que bordea la playa. La Vila Vella, que es el único ejemplo de población medieval fortificada que todavía existe en la costa catalana y que fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional en 1931, se encuentra dentro de un recinto amurallado construido entre los siglos XII y XIV, como defensa por los problemas con la piratería, se conserva casi la totalidad del perímetro original y tres grandes torres cilíndricas llamadas Codolar, de ses Horas y de en Joanàs.