cuadro en la torre del conjuradero, CUENCA DE CAMPOS

(1 de Enero de 2010)
Que enmudezcan nuestras lenguas y empiecen a hablar las manos. FV
Podrás medir el cielo y la tierra, pero nunca la mente humana
Luchamos más por nuestro interes que por nuestros derechos
No exijas lo que no mereces: procura primero dar, sin medida y sin reservas, y recibirás en el momento preciso
Dios jamas nos cierra una puerta sin abrirnos una ventana