Un abrazo, efectivamente, lo que hacían era vestir a la Virgen. Además se podrían llamar santeras, camareras de la Virgen...con qué celo cuidaban que las velas no mancharan el manto, ni el suelo de la iglesia...Siempre que he necesitado protección solo he tenido que pedírselo a la Virgen de la Soledad. Le decíamos a mi abuela que pusiera una vela y que nos encomendara a la protección de la Virgen para aprobar un examen, para una intervención…Ella siempre pensaba y alababa a su Virgen del alma... ... (ver texto completo)