Recuerdo esa epoca en la cual Beni y su moto recorrian el pueblo. Recuerdo sus furiosas ganas de vivir intensemente esos veranos, comiendose la vida por los dos lados, sin fe ni ley. Recuerdo chistes, risas locas y sobre todo su risa tan particular. Recuerdo su locura, su entusiasmo y su alma de nino que el habia sabido conservar. Recuerdo un dia que volviamos del rio abion para el pueblo. Beni y su moto. Y yo con ninguna intencion de subirme detras, es que su manera de conducir no me tranquilizaba mucho. Pero llego a convencerme. Supongo que frente a mi resistencia penso que tenia un miedo exagerado de la moto. Porque ese dia, si que tuve miedo, miedo que nos riesbalemos, que pierdamos el equilibrio de lo despacito que me llevo en ese camino pedrogoso.
Tras su truculencia, se escondia una persona con intenciones delicadas, asi me recuerdo de el.
Tras su truculencia, se escondia una persona con intenciones delicadas, asi me recuerdo de el.
