También conocida como
Cueva de
Salamanca.
Según cuenta la leyenda, que en este espacio, Satanás bajo la apariencia de sacristán, impartía sus clases de ciencias ocultas, adivinación y magia a siete alumnos durante siete años, tras los cuales, uno de ellos debía quedar de por vida a su servicio.
Enrique de
Aragón (1384-1434), Marqués de Villena y de quien la
Torre próxima reci e su nombre, fue alumno de la Cueva de Salamanca y engañó al demonio-sacristán para no quedar a su servicio a costa de perder su
sombra.
La Cueva ha tenido gran protagonismo literario, engrandeciendo su leyenda Cervantes, Calderón de la
Barca, Ercilla,
Torres Villarroel, Feifoo, Botello de Moraes, Walter Scott o Ricardo de Rojas... son algunos de los autores que han escrito de ella.