Busco a Adrian Yenes Astudillo, tendrá sobre 59 años, vive en c/ Nueva 1. Estuvo en Las Palmas en la marina. Soy un viejo amigo de Silla (Valencia) Queria saber de el. mi nombre Angel Mora mail amoramoda@hotmail. com tno 678749699. gracias
Hola Angel, soy Adrian
Hace algún tiempo escribía de vez en cuando en este foro, hasta que esta banda de infieles minaron mi entusiasmo y me pusieron de los nervios a base de crucificar a mi querido amigo EFE, escritor perpetuo y mártir de este foro de pueblo chico. De haber sido entonces, que entraba en el foro con más frecuencia, habría contestado antes a tu mensaje que solamente ahora veo que pusiste hace ya algunos días.
La verdad es que me he alegrado mucho de saber de ti, y he pasado un buen rato recordando aquellos buenos tiempos de nuestra ya lejana juventud.
Cómo pasa el tiempo, y mientras revivo aquellas experiencias, busco en ellas restos de recuerdos que, por más esfuerzo que haga, sé que ya no están, lo mucho que aprendí con vosotros por ejemplo, y que de algún modo acondicionó o dio forma a mi manera de vivir. Pienso también ahora en cómo cambiamos las personas, más bien, cuánto cambiamos sin darnos cuenta, y sobre todo el cambio de las cosas, aunque quizá, las cosas no cambien nunca y sea que al cambiar las personas las veamos de otra manera. He estado desde entonces dos veces más en Las Palmas con intención de ir y ver el barco, una de las veces me dijeron que estaba navegando y la otra me dijo un marinero que ya no existía, pero ya nada era igual en la realidad con mis recuerdos. Pienso en los miles de personas que se despidieron de mi un día sin saber que se iban para siempre, por suerte no ha sido tu caso y me alegro.
Reconozco que en un principio me sorprendió, pues de vivir tantos años después tierra adentro tenía casi olvidado que al igual que Elcano, Magallanes o el mismo Cristóbal Colón yo también fui marino de la Mar Océana.
Ahora te mando un correo y te cuento un par de cosas, recibe mientras tanto un abrazo cordial.
Adrián
Hace algún tiempo escribía de vez en cuando en este foro, hasta que esta banda de infieles minaron mi entusiasmo y me pusieron de los nervios a base de crucificar a mi querido amigo EFE, escritor perpetuo y mártir de este foro de pueblo chico. De haber sido entonces, que entraba en el foro con más frecuencia, habría contestado antes a tu mensaje que solamente ahora veo que pusiste hace ya algunos días.
La verdad es que me he alegrado mucho de saber de ti, y he pasado un buen rato recordando aquellos buenos tiempos de nuestra ya lejana juventud.
Cómo pasa el tiempo, y mientras revivo aquellas experiencias, busco en ellas restos de recuerdos que, por más esfuerzo que haga, sé que ya no están, lo mucho que aprendí con vosotros por ejemplo, y que de algún modo acondicionó o dio forma a mi manera de vivir. Pienso también ahora en cómo cambiamos las personas, más bien, cuánto cambiamos sin darnos cuenta, y sobre todo el cambio de las cosas, aunque quizá, las cosas no cambien nunca y sea que al cambiar las personas las veamos de otra manera. He estado desde entonces dos veces más en Las Palmas con intención de ir y ver el barco, una de las veces me dijeron que estaba navegando y la otra me dijo un marinero que ya no existía, pero ya nada era igual en la realidad con mis recuerdos. Pienso en los miles de personas que se despidieron de mi un día sin saber que se iban para siempre, por suerte no ha sido tu caso y me alegro.
Reconozco que en un principio me sorprendió, pues de vivir tantos años después tierra adentro tenía casi olvidado que al igual que Elcano, Magallanes o el mismo Cristóbal Colón yo también fui marino de la Mar Océana.
Ahora te mando un correo y te cuento un par de cosas, recibe mientras tanto un abrazo cordial.
Adrián
Hola Adrián
Me alegra mucho saber de ti marinero tierra adentro. espero que me pases tu correo.
El Villaamil, navega de nuevo en una procelosa mar de recuerdos.
Salut amigo
Angel Mora
Me alegra mucho saber de ti marinero tierra adentro. espero que me pases tu correo.
El Villaamil, navega de nuevo en una procelosa mar de recuerdos.
Salut amigo
Angel Mora
Pues, como te decía, estando una vez en Las Palmas me acerqué hasta el Arsenal para ver si me dejaban visitar el Villaamil, y en la puerta del Arsenal, que por cierto está igual que siempre aunque todo lo demás haya cambiado, me dijo un marinero, que más que marinero dispuesto a defendernos la Patria y devolvernos la perdida honra en Trafalgar me pareció un chaval que fuera a la iglesia vestido de marinero para hacer la primera comunión, que no existía el Villaamil, No pude por menos de decir: ¡este, capaz de haber hundido el barco!, pensando en un sargento bastante bruto del que recuerdo apellidos y nombre, pero diré solamente que se llamaba José y fue mi jefe entonces, quizá le conocieras, gallego él.
La verdad es que a pesar de no hablar él del todo castellano nos entendíamos bastante bien, que yo tampoco tengo muchas luces, y de haber seguido juntos habríamos hecho sin duda algo grande, pues cada vez que desarmábamos algo nos sobraban piezas, y no es nada descabellado pensar que con el tiempo habríamos hecho otro barco, o vaya usted a saber el qué, con las piezas restantes que guardábamos con cierto orgullo en un pañol al lado de la sala de máquinas.
Después me he enterado que no lo hundió José, mi sargento, y ni siquiera Arturo, el contramaestre, más apto si cabe incluso que José para llevar a la práctica el hundimiento del patrullero. Fue desguazado en junio de 1993.
A lo que te iba Ángel, que se me fue el santo al cielo con los recuerdos y, escribía para decirte que el pasado domingo, poco después de contestar a tu mensaje en este foro, te mandé un correo en el que es de suponer fuera mi dirección, pero si por algún motivo no ha llegado, me lo dices y te le haré llegar de otro modo o pondré aquí mi E-mail.
Saludos.
La verdad es que a pesar de no hablar él del todo castellano nos entendíamos bastante bien, que yo tampoco tengo muchas luces, y de haber seguido juntos habríamos hecho sin duda algo grande, pues cada vez que desarmábamos algo nos sobraban piezas, y no es nada descabellado pensar que con el tiempo habríamos hecho otro barco, o vaya usted a saber el qué, con las piezas restantes que guardábamos con cierto orgullo en un pañol al lado de la sala de máquinas.
Después me he enterado que no lo hundió José, mi sargento, y ni siquiera Arturo, el contramaestre, más apto si cabe incluso que José para llevar a la práctica el hundimiento del patrullero. Fue desguazado en junio de 1993.
A lo que te iba Ángel, que se me fue el santo al cielo con los recuerdos y, escribía para decirte que el pasado domingo, poco después de contestar a tu mensaje en este foro, te mandé un correo en el que es de suponer fuera mi dirección, pero si por algún motivo no ha llegado, me lo dices y te le haré llegar de otro modo o pondré aquí mi E-mail.
Saludos.
