Hola a todos, pues yo soy Marta, la de Rosalía, que a su vez es la de Lidia. También he pasado toda mi infancia veraneando en nuestro pueblo y tengo un montón de recuerdos inolvidables.
Los de mi "quinta" éramos unos cuantos: Raquel, Esther, Olga, Carlos, Raúl, Alberto, Julio, Sául, Negrito, Ana, Yobani, Merceditas, Mariola, y creo que no me olvido de nadie, si es así, que me perdone.
Y que cosas, sin ordenador, ni teléfono móvil, ni siquiera teléfono fijo, ni Game-boy, ni chats, ni tiendas para comprar gominolas, nos lo pasábamos genial, íbamos con la bici carretera arriba hasta el Alto de la Mocha, o bien cazábamos renacuajos en la pozas y los guardábamos en un bote de Cola-Cao (si nos hubiera visto Greenpeace, nos hubieran puesto una multa de cuidao). Y también me acuerdo cuando jugábamos en el frontón en la pared de la iglesia, o tocábamos las campanas, que broncas nos echaban!!, o cuando en la huesera, nos pegábamos por coger los mejores huesos, o cuando tomábamos prestadas manzanas al tío Francisco, o cuando íbamos a "El Corte Inglés" (lo siento, es un secreto, no puedo explicar donde está), o nos tirábamos por lo badenes con cartones, o cuando íbamos a por moras, o cuando jugábamos en las Vallejinas, o cuando íbamos por la noche al cementerio, o cuando explorábamos todas las casas viejas, no dejamos ni una, lo siento por los más jóvenes, que ya no podéis hacer campamentos como los nuestros, ah! y también me acuerdo cuando jugábamos a la comba, a la goma, a sangre, a tres navíos en el mar, a pico – zorro - zaina, al castro, a las peonzas, a la Isla de Tesoro, al Monopoli (eras partidas interminables).
Bueno, no me enrrollo más, a ver si algún día conseguimos reunirnos todos los de aquella famosa foto de la era, espero que la tengáis en un sitio privilegiado de vuestro álbum.
Un besote muy fuerte para todos.
Los de mi "quinta" éramos unos cuantos: Raquel, Esther, Olga, Carlos, Raúl, Alberto, Julio, Sául, Negrito, Ana, Yobani, Merceditas, Mariola, y creo que no me olvido de nadie, si es así, que me perdone.
Y que cosas, sin ordenador, ni teléfono móvil, ni siquiera teléfono fijo, ni Game-boy, ni chats, ni tiendas para comprar gominolas, nos lo pasábamos genial, íbamos con la bici carretera arriba hasta el Alto de la Mocha, o bien cazábamos renacuajos en la pozas y los guardábamos en un bote de Cola-Cao (si nos hubiera visto Greenpeace, nos hubieran puesto una multa de cuidao). Y también me acuerdo cuando jugábamos en el frontón en la pared de la iglesia, o tocábamos las campanas, que broncas nos echaban!!, o cuando en la huesera, nos pegábamos por coger los mejores huesos, o cuando tomábamos prestadas manzanas al tío Francisco, o cuando íbamos a "El Corte Inglés" (lo siento, es un secreto, no puedo explicar donde está), o nos tirábamos por lo badenes con cartones, o cuando íbamos a por moras, o cuando jugábamos en las Vallejinas, o cuando íbamos por la noche al cementerio, o cuando explorábamos todas las casas viejas, no dejamos ni una, lo siento por los más jóvenes, que ya no podéis hacer campamentos como los nuestros, ah! y también me acuerdo cuando jugábamos a la comba, a la goma, a sangre, a tres navíos en el mar, a pico – zorro - zaina, al castro, a las peonzas, a la Isla de Tesoro, al Monopoli (eras partidas interminables).
Bueno, no me enrrollo más, a ver si algún día conseguimos reunirnos todos los de aquella famosa foto de la era, espero que la tengáis en un sitio privilegiado de vuestro álbum.
Un besote muy fuerte para todos.
