La primera vez que la oí nombrar, me estremecí.
¡LA HUEBRA…..!
Sonaba a arcaico y pensé:
- ¡Ésta por lo menos tiene que ser la maligna guardiana del Cuélebre! –
Ese monstruo legendario que según el cantante Víctor Manuel, tiene la escama de un pez, vive dentro del río y nadie lo ve.
¡Qué ignorancia la mía!
En un principio dije que sí…, que sabía de que se trataba, y corrí a consultar con el diccionario de la RAE.
¡No puede ser, me van a poner un burro para arar la tierra, o algo así! – Me dije -
Mas tarde me explicaron que no…, que se trata de un palabro de la zona, y solo se pretendía de mi, que barriera la calle y quitara las hierbas…, poco más o menos.
Así que me puse manos a la obra barriendo y desbrozando el entorno, sin saber qué hacer posteriormente con la farfolla generada.....
Me dispuse a dar un paseo por el monte y decidí hacer esa ruta nº 3 que tanto se publicita, y de paso ver el centenario “Mojón de la Abadesa”. Lugar emblemático por haber delimitado las propiedades del Monasterio de San Andrés de Arroyo en el antiguo camino que se utilizó para ir a Cuevas, según la leyenda del cartel que allí encontré. Hoy en día, marca el límite con la provincia de Burgos.
También me encontré otras cosas….,
Por lo visto había pasado por la zona una manada de “Ojancos” desperdigando un montón de escatológicas ofrendas, seguramente para aplacar la ira del duende Martinico o saciar al famoso Tragaldabas.
Me pareció excesiva tal donación, así que me llevé lo poco que cupo en la pequeña mochila que llevaba y regresé desanimado a Alar.
Ahora las campanas ya no tocan a Rebato ni a Tentenublo, ahora tocan a Huebra.
Creo que como no se haga algo, ni la maligna Huebra montada en el Cuélebre, podrá dar cuenta de tal festín.
Saludos para tod@s.
: (
¡LA HUEBRA…..!
Sonaba a arcaico y pensé:
- ¡Ésta por lo menos tiene que ser la maligna guardiana del Cuélebre! –
Ese monstruo legendario que según el cantante Víctor Manuel, tiene la escama de un pez, vive dentro del río y nadie lo ve.
¡Qué ignorancia la mía!
En un principio dije que sí…, que sabía de que se trataba, y corrí a consultar con el diccionario de la RAE.
¡No puede ser, me van a poner un burro para arar la tierra, o algo así! – Me dije -
Mas tarde me explicaron que no…, que se trata de un palabro de la zona, y solo se pretendía de mi, que barriera la calle y quitara las hierbas…, poco más o menos.
Así que me puse manos a la obra barriendo y desbrozando el entorno, sin saber qué hacer posteriormente con la farfolla generada.....
Me dispuse a dar un paseo por el monte y decidí hacer esa ruta nº 3 que tanto se publicita, y de paso ver el centenario “Mojón de la Abadesa”. Lugar emblemático por haber delimitado las propiedades del Monasterio de San Andrés de Arroyo en el antiguo camino que se utilizó para ir a Cuevas, según la leyenda del cartel que allí encontré. Hoy en día, marca el límite con la provincia de Burgos.
También me encontré otras cosas….,
Por lo visto había pasado por la zona una manada de “Ojancos” desperdigando un montón de escatológicas ofrendas, seguramente para aplacar la ira del duende Martinico o saciar al famoso Tragaldabas.
Me pareció excesiva tal donación, así que me llevé lo poco que cupo en la pequeña mochila que llevaba y regresé desanimado a Alar.
Ahora las campanas ya no tocan a Rebato ni a Tentenublo, ahora tocan a Huebra.
Creo que como no se haga algo, ni la maligna Huebra montada en el Cuélebre, podrá dar cuenta de tal festín.
Saludos para tod@s.
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