Entre rejas, VILLUSTO
Continuación de: ver foto "fuente con pilón"
Fotografía sacada desde la "estufa" o "gloria" de nuestra casa, situada a pocos pasos de la fuente y lugar estratégico y privilegiado para contempla todo lo que acontecía en la plaza y concretamente alrededor de la fuente. La ventana era la televisión de entonces, todos los programas se veían en directo.
Entre rejas observo la fuente sin vida: no cae agua y el pilón está vacío; los niños no disfrutan del agua limpia y cristalina, sana y fresca ni se ensucian jugando con el barro que se hacía con el agua sobrante. El haber metido el agua en las casas, quitó todo protagonismo a la fuente. Se cerró un caño y se abrieron muchos grifos.
El agua bajaba desde el manantial/depósito, localizado cerca de las praderas de la "aguanera", atravesando los campos con la ayuda de la canalización subterránea - ¡obra maestra de ingeniería!- hasta llegar a las dos únicas fuentes del pueblo (la del barrio de arriba y la del de abajo)
Nunca he sabido exactamente por dónde va esta magnífica canalización, ni tampoco quiénes fueron los constructores y la fecha de construcción. ¡seguramente que hay documentos oficiales!
La fuente era un lugar de encuentro, de comunicación, de diálogo, de convivencia, de paso:
-entre las mujeres que iban a por agua para las necesidades personales y de la casa haciendo`cola´ en la fuente,
-entre los hombres que llevaban el ganado a beber en el pilón,
-entre mozos y mozas que se hacían los encontradizos con la excusa de hacer un servicio doméstico,
-entre las cuadrillas de chicos y chicas que quedaban en la fuente,
-entre los niños y niñas que disfrutaban corriendo alrededor de la fuente y jugaban a hacer presas con tierra/barro para retener el agua sobrante del pilón antes de llegar al arroyo que lo llevaba al rio.
También las gallinas picaban la tierra, bebían y buscaban lombrices. Los perros y gatos siempre encontraban un hueso a algún resto de comida. No faltaban palomas ni gorriones. Las golondrinas cogían el barro con el que construían sus nidos en los aleros de las casas. Se veían muchas mariposas posadas en tierra húmeda.
Fotografía sacada desde la "estufa" o "gloria" de nuestra casa, situada a pocos pasos de la fuente y lugar estratégico y privilegiado para contempla todo lo que acontecía en la plaza y concretamente alrededor de la fuente. La ventana era la televisión de entonces, todos los programas se veían en directo.
Entre rejas observo la fuente sin vida: no cae agua y el pilón está vacío; los niños no disfrutan del agua limpia y cristalina, sana y fresca ni se ensucian jugando con el barro que se hacía con el agua sobrante. El haber metido el agua en las casas, quitó todo protagonismo a la fuente. Se cerró un caño y se abrieron muchos grifos.
El agua bajaba desde el manantial/depósito, localizado cerca de las praderas de la "aguanera", atravesando los campos con la ayuda de la canalización subterránea - ¡obra maestra de ingeniería!- hasta llegar a las dos únicas fuentes del pueblo (la del barrio de arriba y la del de abajo)
Nunca he sabido exactamente por dónde va esta magnífica canalización, ni tampoco quiénes fueron los constructores y la fecha de construcción. ¡seguramente que hay documentos oficiales!
La fuente era un lugar de encuentro, de comunicación, de diálogo, de convivencia, de paso:
-entre las mujeres que iban a por agua para las necesidades personales y de la casa haciendo`cola´ en la fuente,
-entre los hombres que llevaban el ganado a beber en el pilón,
-entre mozos y mozas que se hacían los encontradizos con la excusa de hacer un servicio doméstico,
-entre las cuadrillas de chicos y chicas que quedaban en la fuente,
-entre los niños y niñas que disfrutaban corriendo alrededor de la fuente y jugaban a hacer presas con tierra/barro para retener el agua sobrante del pilón antes de llegar al arroyo que lo llevaba al rio.
También las gallinas picaban la tierra, bebían y buscaban lombrices. Los perros y gatos siempre encontraban un hueso a algún resto de comida. No faltaban palomas ni gorriones. Las golondrinas cogían el barro con el que construían sus nidos en los aleros de las casas. Se veían muchas mariposas posadas en tierra húmeda.
(Septiembre de 1982)
