Tenemos “fumata blanca” en nuestras chimeneas, HERMOSILLA

(2016)
Las nubes van soltando lentamente gota a gota la esperada lluvia. El cielo por fin encapotado ofrece su liquido regalo a las sedientas y agrietadas tierras burebanas. Tarde pero ahí están ellas las lluvias para dar tempero, y que las oxidadas rejas de los curvos arados volteen otra vez la agotada tierra.

El frío también llega, y las pocas manos que quedan, encienden las chimeneas. No hemos cambiado mucho desde que nuestros antepasados descubrieron el fuego para calentarse y cocinar los alimentos....