Sabíamos que la superación de las Diputaciones iba a ser un hueso duro de roer. Hemos visto, en ocasiones, la cantidad ingente de intereses partidistas que hay en ellas en los grandes partidos políticos.
Por otra parte, hay importantes administrativistas, como Parada Vázquez, que las consideran muy importantes en la historia española de estos dos últimos siglos. Estoy seguro de que esta voz, y otras que tienen cierto prestigio en el ámbito de la derecha o del centro, son muy bien escuchadas en estos ámbitos de poder (PP y PSOE).
Potenciar los poderes más ligados directamente a las bases de la sociedad es un peligro porque abundan los partidos y agrupaciones de naturleza local que ni obedecen con facilidad a los poderes de fuera de su ámbito y, posiblemente, se incrementaría mucho su número como ocurre en Suiza.
Si observamos bien en el PSOE, no sé por qué -aunque no es difícil desconocerlo-, se ha esfumado un cierto debate que se abrió sobre las diputaciones hace unos meses.
Por otra parte, hay importantes administrativistas, como Parada Vázquez, que las consideran muy importantes en la historia española de estos dos últimos siglos. Estoy seguro de que esta voz, y otras que tienen cierto prestigio en el ámbito de la derecha o del centro, son muy bien escuchadas en estos ámbitos de poder (PP y PSOE).
Potenciar los poderes más ligados directamente a las bases de la sociedad es un peligro porque abundan los partidos y agrupaciones de naturleza local que ni obedecen con facilidad a los poderes de fuera de su ámbito y, posiblemente, se incrementaría mucho su número como ocurre en Suiza.
Si observamos bien en el PSOE, no sé por qué -aunque no es difícil desconocerlo-, se ha esfumado un cierto debate que se abrió sobre las diputaciones hace unos meses.
