CARTUJA DE MIRAFLORES
En el lugar de Miraflores, a las afueras de
Burgos, el rey castellano Enrique III erigió en 1401 un
palacio al que acudía a
cazar. Su hijo Juan II entregó dicho palacio a la Orden de los Cartujos con la intención de convertirlo en panteón real de Castilla.
En su construcción intervinieron artistas de la talla de Juan y Simón de Colonia y Pedro Berruguete. Por encargo de la reina Isabel I de Castilla, Gil de Siloe realizó el
Retablo Mayor y el sepulcro de sus padres, Don Juan II de Castilla e Isabel de
Portugal.
La Cartuja de Miraflores está habitada por una comunidad de monjes pertenecientes a la Orden Monástica de la Cartuja. Fundada por
San Bruno en el siglo XI, es una de las formas de monacato más singulares que pervive en la actualidad.