La vida parroquial y litúrgica se lleva a cabo en la
iglesia de
San Nicolas, en la
calle Fernán González, junto a la
catedral. Aunque la
gótica sencillez externa, con tres naves,
ábside rectangular con contrafuertes y
portada sencilla con tres arquivoltas,
arco rebajado y tímpano, no llama demasiado la atención al visitante, sin embargo es un precioso joyero que guarda la más maravillosa obra de Francisco de Colonia: el
retablo de
piedra policromada, que nadie debe dejar de admirar.
Una sencilla
espadaña con dos
campanas le sirve de
torre.
Los habitantes de la feligresía están en torno a los 1400.
En su territorio regenta el
colegio llamado de “Saldaña” una comunidad de Hijas de la Caridad